sábado, 16 de junio de 2012

Yo sólo


Tengo 27 años. Estudié durante 6 años para obtener dos licenciaturas de humanidades, filosofía y periodismo. Antes cursé preescolar, dos años de EGB, el resto de Primaria, la ESO y los dos años de Bachillerato, lo que da un total de 15 años de educación básica. Ahora mismo lucho contra la desidia para acabar un máster, lo que supone mi séptimo año de estudios de educación superior. Todo esto no me convierte en mejor persona. Tampoco en peor.

Nunca he tenido nada lo suficientemente estable como para afirmar que he trabajado. Intenté ser árbitro de baloncesto, intenté vender cuentas universitarias para un banco, probéar en un puesto del rastro de verduras, trabajé en verano en una cadena y disfruté de otros trabajos puntuales de ETT. Mi trabajo más estable fue como vendedor a tiempo parcial en una gran superficie de artículos deportivos (y nada deportivos). No lo recuerdo bien, pero duró algo más de un año.

Dejé ese trabajo, lo dejé, para hacer prácticas en un diario. Para algo había ido a la universidad, para tener la oportunidad de aprender un oficio. Tras tres meses trabajando en el periodismo me di cuenta de que no era mi pasión. Se me acabó la beca y decidí no continuar porque consideré que las condiciones no compensaban la realización de un trabajo en el que no creía. Que vampirizaba la pasión de gente mucho mejor que yo.

Intenté ir a Reino Unido, y fuí. Había dejado de estudiar inglés en el bachillerato, sin embargo había continuado leyendo y viendo películas en inglés. En Inglaterra tuve mala suerte y miedo. Miedo a la soledad, miedo a estar donde no pertenecía. Miedo porque en el fondo no sabía dónde estaba. Sin embargo descubrí que me gustaba explicar las cosas a las personas, porque la educación y la cultura eran las únicas cosas que nos mantienen cuerdos.

Volví un mes después con la intención de sacudirme todo aquel miedo. Me apunté a todas las ETTs y fui a que me asesoraran para encontrar un empleo. Necesitaba el dinero si quería estudiar el máster que me convertiría en profesor. En todos los sitios me dijeron lo mismo: estaba sobre cualificado, aunque esa sobre cualificación tampoco servía de nada.

Tuve suerte y me dieron trabajo en una academia. Se trata de un trabajo que va a temporadas, según las necesidades de la academia. Hay meses que muy bien, otros que no tanto. Otros que nada. No es una vida cómoda, aunque lo pueda parecer. Tienes muchas horas sueltas, lo que la gente interpreta con tiempo libre. Pero da para sobrevivir.

Un año y medio después conseguí la beca, con una minúscula bonificación por expediente, para estudiar el máster de profesor de secundaria. Lamentablemente éste no era compatible con el horario y las prácticas del máster, por lo que tuve que abandonar la academia. Para poder financiarme tuve que buscarme una clase los domingos. Mientras tanto la crisis fue destruyendo cualquier opción de trabajar de profesor en el sistema educativo. 

Hace unos pocos días tuve que cancelar mi cuenta en el banco. Me cobraban por no tener dinero 40€ en comisiones al año sencillamente por no tener dinero y ser mayor de 26 años. No tener dinero es lo que tiene, que eres una persona sin recursos. El estado, a partir de septiembre me expenderá una tarjeta sanitaria que dirá precisamente eso, que soy una persona sin recursos. Será eso o quedarme sin asistencia sanitaria. Al igual que el banco, nuestros gobernantes piensan que a partir de cierta edad uno no puede ser pobre. O sí, pero debes estar perfectamente identificado.

Tras dejar mi currículo en todos los colegios concertados donde puedo optar a trabajar, su silencio y los crecientes recortes cierran cualquier puerta a que pueda ser empleado el año que viene, una suerte que comparten muchos compañeros de máster. El silencio no es nuevo, no me han llamado de ningún trabajo al que he echado desde hace un año. Y las cosas que me han ofrecido, o eran sin remunerar o se esfumaron conforme la crisis avanzaba.

El futuro es gris. En la academia he perdido el sitio, así que lo tendré más difícil el año que viene. Por un error de cálculo este año me he sacado el B1 de inglés, aunque habría sido capaz de más. Cometí la imprudencia de no aprender más idiomas. Mientras tanto mi mundo se tambalea, porque las pocas cosas que se mantenían firmes dan muestras de cansancio. Mi familia sufre los embates de la crisis, sin olvidar los propios de la vida. He enfriado mis relaciones personales hasta el punto de prácticamente perderlas. Y la verdad es que no tengo mucho más.

Y no dejo de pensar qué hice tan mal. Dónde empecé a equivocarme. Tal vez podáis ayudarme, porque lo que soy está ahí. No voy a compararme, porque igual salen cosas. Mi falta de ambición. Mis problemas de carácter. Mi miedo y mi cobardía. Sin embargo, sigo sin creer que lo haya hecho tan mal. A veces, las cosas simplemente salen así.

Cada día hay que levantarse y luchar. No amargarse y mantener la esperanza. Sé que he cometido muchos errores, algunos ni soy capaz de imaginarlos, pero quedan atrás. Seguir adelante, sea a donde sea. Vivir la experiencia, disfrutar y esperar a que salga el sol. Tragar lo que te toca y apechugar. Aprender de los errores, porque caer está permitido, pero es obligatorio levantarse.

Sin embargo sólo puedo decir que me da igual. Yo hice lo que se me pidió. Siempre hice lo que creí correcto y no me arrepiento. Esto es lo que soy, y lo asumo. No puedo esconderlo, no debo. Hay quien piensa que no avanzo porque no quiero, y no lo sé. Lo único que sé es que yo no sé cómo arreglarlo. Lo que no toleraré jamás es que me digan que he vivido por encima de mis posibilidades.

Si acaso, que no supe aprovecharlas.

5 comentarios:

Senior dijo...

A veces, hay gentes, que enfangadas, sucias, y sin valor, aparecen ante los demás como "triunfales"... pero la verdad es que otros, muchos, les miramos de pié con compasión... la dignidad es un vestido tan sutil y bello que los ojos deslumbrados o acostumbrados a la oscuridad tardan muchísimo en descubrir, pero este manto, seguro que a los que lo visten, puede que no coman mucho, pero les abriga dándoles calor humano.
Y no, no has hecho nada mal, puede que no supimos preparar el futuro, vuestro presente, fuimos nosotros, y por supuestísimo, tampoco viví por encima de mis posibilidades.

izanik dijo...

El dogma de que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades es una gran mentira. Posibilidades. Antes las posibilidades existían. "Estudia la profesión que te guste, no la que tiene empleo". "Coge este dinero y cómprate una casa más grande".Tienes la posibilidad. Es posible. Es mentira que estuviera por encima de nuestras posibilidades. En todo caso, estaba por encima de las posibilidades de quien nos lo ofrecía. El problema es que ahora lo pagamos nosotros, no ellos.

No te culpes por cómo van las cosas. No pienses que eres una isla maldita. La mayoría de personas de nuestra edad no tienen nada estable, ni unas perspectivas reales. Pensábamos que teníamos posibilidades, pero era mentira.

Lo peor de todo es que me da la sensación de que todo está así porque queremos. No somos conscientes de la fuerza que tiene la masa. La gente, sin miedo, es mucho más poderosa que el FMI o un ejército. A pesar de nuestra inteligencia, nuestro egoísmo y miedo sistemáticos nos ponen zancadillas.

No poder ofrecer un trabajo a la generación mejor preparada de la historia de este país es una desgracia. Es el mayor de los fracasos de nuestra cultura. Pero todavía no hemos despertado. Despertar. Para eso sirven las "inútiles" manifestaciones de la calle. ¡Qué poca gente de nuestra edad sale en Pamplona en contra de los recortes! ¡Y cuánta gente se ve en el juevintxo de los cojones! Tenemos que salir más, y gritar más alto.

Ten paciencia. Esto va muy despacio. Pero tendrá que cambiar.

consmayoral dijo...

Hola, tengo un hijo con 29 años que tampoco encuentra trabajo, el ni siquiera tiene terminado graduado escolar, es dislesico y miedoso, cree que se rien de el por que necesita mas tiempo que los demas para entender los estudios, pero bueno lo que queria decirte es, que no tengas miedo, que saques la cabeza y mires hacia arriba, si aqui no encuentras nada emigra, en America hay trabajo, busca y encontraras.
Te deso lo mejor, saludos.

Anónimo dijo...

Bueno... tienes dos carreras, si... pero... Esas dos carreras tenían salidas en el momento en el que las cursaste?

Esta muy bien sacarse una carrera por vocación, pero también hay que tener muy en cuenta las salidas laborales que ésta tenga.

RTT dijo...

que fea realidad se vive en España, aca en Perú tengo el privilegio de tener tres trabajos y descartar uno