"No podré contar que ocurrió ayer. Fue hace tanto tiempo, que el sol se ha vuelto a poner. Embobado acaricio la piedra que encontré. Todos duermen, pero ella con el ruido de antes no la pudo ver. Con vivos muertos, brindando juntos por un año mas... un año menos. Un año menos que dolerse de esta herida y de esta luz...
Ella llegó tarde y no vio a nadie, fue directa a dormir. En vez de su piedra, encontró una fiesta en su salón. Con vivos muertos brindando juntos por un año más... un año menos, que dolerse de esta herida y de esta luz."
Las buenas gentes con las que tengo el honor de compartir mi camino sirven muchas veces para hacerte ver cuando te has equivocado y cuando no. El mundo se está volviendo loco a la par que mi proceso catarral. Hay una imagen que me gusta, y es la de un balazo. Sí, así de violento y agresivo. Me gustaría tener una pistola que sacudiera balazos informativos por doquier. Tanta belleza y tanta miseria sólo caben en un lugar dónde sólo hay balas de matar.
Y no lo digo por la situación del Real Madrid. Es mi equipo por circunstancias geográficas, pero cada vez me da más asco él y su circunstancias. La falta terrible de humildad es una lacra que se ha adueñado del deporte "rey" hasta las trancas. Otra cosa fina es Corea del Norte, dónde no sólo están contentos con su situación de penuría y opresión, sino que votan cual galegos de tierras orientales y le dan el 100% de los votos a Kim Jong-il. Lo cual demuestra dos cosas: que él coreano se votó a sí mismo siendo coherente -es el único que vive bien allí-, y que Rajoy Brey es todo un caballero al votar en blanco en su investidura como candidato. ¡Oa oa oa, Rajoy a la Moncloa!
Y es que estos días nos dejan tantas perlas que no merece la pena darse cuenta del garete al que se va precipitando el mundo. Mientras Urkullu acusa a los socialistas de hablar con batasuna -llegar a estas cosas debería matar de vergüenza a más de uno- para desalojarles del poder -¿cómo?- la justicia se presenta ante el ciudadano como una escoria ruín y sectaria. Entre los desmanes de Garzón -que no da una- y el Supremo acusando al magistrado de irregularidades, poca fe dan de la Justicia con mayúsculas. No importa que se cojan los malos, lo que importa es que todos somos malos. ¿Relativismo moral? Yo creo que más bien innopia e indigencia ética e intelectual.
El otro día escuchaba a la abuela de mi antiheroína decir por teléfono que muchas veces no somos conscientes de lo afortunados que somos. Como cualquier abuelo -mis padres también- tiene mucho que contar sobre los tiempos duros. Yo soy tan afortunado que quizá esté ansiando permanentemente algo más.
Permanecer anclado en el fatalismo puede hacernos perder la visión y con él todos los sentidos. Incluído el común -y menos extendido-. Si hacemos eso corremos el riesgo de ser vivos muertos festejando el simple paso del tiempo. Cualquier tiempo pasado fue pasado y ya está. Así que demos gracias por estar en el presente (y futuro) Y yo me comprometo a hablar más de música.
Gracias Zeus por Vetusta Morla.
Salud & aventura!
Y no lo digo por la situación del Real Madrid. Es mi equipo por circunstancias geográficas, pero cada vez me da más asco él y su circunstancias. La falta terrible de humildad es una lacra que se ha adueñado del deporte "rey" hasta las trancas. Otra cosa fina es Corea del Norte, dónde no sólo están contentos con su situación de penuría y opresión, sino que votan cual galegos de tierras orientales y le dan el 100% de los votos a Kim Jong-il. Lo cual demuestra dos cosas: que él coreano se votó a sí mismo siendo coherente -es el único que vive bien allí-, y que Rajoy Brey es todo un caballero al votar en blanco en su investidura como candidato. ¡Oa oa oa, Rajoy a la Moncloa!
Y es que estos días nos dejan tantas perlas que no merece la pena darse cuenta del garete al que se va precipitando el mundo. Mientras Urkullu acusa a los socialistas de hablar con batasuna -llegar a estas cosas debería matar de vergüenza a más de uno- para desalojarles del poder -¿cómo?- la justicia se presenta ante el ciudadano como una escoria ruín y sectaria. Entre los desmanes de Garzón -que no da una- y el Supremo acusando al magistrado de irregularidades, poca fe dan de la Justicia con mayúsculas. No importa que se cojan los malos, lo que importa es que todos somos malos. ¿Relativismo moral? Yo creo que más bien innopia e indigencia ética e intelectual.
El otro día escuchaba a la abuela de mi antiheroína decir por teléfono que muchas veces no somos conscientes de lo afortunados que somos. Como cualquier abuelo -mis padres también- tiene mucho que contar sobre los tiempos duros. Yo soy tan afortunado que quizá esté ansiando permanentemente algo más.
Permanecer anclado en el fatalismo puede hacernos perder la visión y con él todos los sentidos. Incluído el común -y menos extendido-. Si hacemos eso corremos el riesgo de ser vivos muertos festejando el simple paso del tiempo. Cualquier tiempo pasado fue pasado y ya está. Así que demos gracias por estar en el presente (y futuro) Y yo me comprometo a hablar más de música.
Gracias Zeus por Vetusta Morla.
Salud & aventura!
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4 comentarios:
Vivos muertos-muertos vivientes. ¿Zombies? Para ellos cualquier tiempo pasado siempre fue mejor. O no.
Buen y complejo artículo.
Por otra parte te perdono lo del Real Madrid. Nunca se escoge donde uno nace.
...de mi "puta mili", sólo me quedan las buenas historias, y gracias a esta "puta mili", y poniendo un poco de interés, comprendí lo de que cualquier tiempo pasado fué mejor, sólo me acuerdo de los buenos momentos, los malos casi los he olvidado, al menos muchos... esa y no otra es la razón, lo vivido , que son los gratos recuerdos, mejoran los minutos amargos que tenemos que vivir en el día a día... por eso, suelo proponer disfrutar del momento, del presente, por si no se puede repetir, e incluso por si superas ese con otro gran minuto. Seamos vivos vivos, solo asi un día podremos tener la suficiente dignidad de ser sencillamente, Inmortales, muertos vivos, eternamente vivos, y además sin afan de notoriedad, sólo adheridos a la memoria, al recuerdo, a los buenos momentos. ¡Alud de Ventura!.
Iba a escribir algo pero al final paso. ¿Por qué? porque creo que explicar algo que está ahí, que la gente lo ve y entiende, no debería ser explicado.
A veces pienso que la gente es como los asnos tirando de un carro que les pones las orejeras y tiran p'alante. Pero digo ¡No! La gente debe ser algo más. Siempre caigo en eso y me lo recriminan pero es que no puedo entender que la gente sea así.
Bueno comentemos música que de eso mola más.
Vaya, ya me han descubierto, tendré que dejar el anonimato, mi apodo de anónima por el de antiheroína.
Yo doy fe de que no tienes una pistola, pero la velocidad a la que van tu mente y tus dedos, son iguales que esas balas que te gustarían tener.
En serio, cada día es más amplio tu blog, hablas de más cosas, etc. Estoy muy orgullosa
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